Psic. Gonzalo Valenzuela
“La familia es un complemento nuestro, complemento mayor que nosotros, anterior a nosotros y que nos sobrevivirá con lo mejor de nosotros”.
-Alphonse de Lamartine
Integrar una familia es sencillo, sólo basta con que decidas casarte, procrear hijos y listo, lo difícil es darle una dirección, proyectarse al futuro, a dónde quieren llegar, cómo van a formar a los hijos, qué tipo de valores les inculcarán, cuáles serán sus metas a largo plazo, qué clase de seres humanos le entregarán a la sociedad.
Ahora más que nunca hace falta que te des cuenta de la enorme responsabilidad de ser cabeza de familia y junto con tu pareja decidan su Misión familiar, compartan la misma visión y trabajen a diario para que sus hijos vayan haciendo suyos esos principios que decidan inculcarles, no esperen que la escuela haga el trabajo de ustedes en el hogar.
Recuerda que el niño aprende lo que vive, de la convivencia diaria con sus padres, hermanos, y con todos los que comparten el mismo techo, tus hijos absorberán en sus mentes y en sus corazones las actitudes básicas y los hábitos, desarrollarán sus capacidades y creencias que los llevarán al éxito o al fracaso.
¿Hacia dónde va tu familia?… Si aún no tienes un proyecto familiar, es conveniente que junto con tu pareja e hijos lo elaboren en forma sencilla y divertida, explícales que al igual que cuando van a salir de viaje, necesitan decidir primero a dónde irán, cuál será el propósito, qué les gustaría llevar consigo para hacer más agradable el viaje.
Diles que lo mismo pasa con su familia, tienen que decidir a dónde quieren llegar, es decir, qué clase de familia les gustaría ser, de tal manera que se sientan orgullosos y a gusto de pertenecer a ella, para ello pídeles a cada integrante que piensen y anoten tres cosas muy importantes que deben estar presentes en su familia, por ejemplo, el respeto, el amor, la confianza, etc.
Entusiásmalos con este ejercicio, anímalos a participar, a que decidan juntos qué tipo de familia les gustaría llegar a ser. Una vez que tengan el enlistado, pueden ir eliminando las ideas que se repitan y después jerarquícenlas, pónganse de acuerdo a cuál le asignarán el número uno con base en argumentos sólidos y no por simpatía o mayoría de votos.
Esta parte del ejercicio es la más rica para el debate familiar, ya que les permitirá analizar y discutir sobre los aspectos más importantes que darán dirección, orden y sentido a su familia, incluyan todas las esferas del desarrollo humano, que les lleven a esa armonía familiar, que fortalezca su fe y a la vez les lleve a crear ese espíritu de vivir en comunidad.
Por último, redacten su Misión Familiar, con base en los aspectos importantes ya jerarquizados, de manera creativa y atractiva, colóquenla en un lugar visible para que todos puedan releerla y les sirva de guía, cuando se desvíen de la dirección y se salgan de la ruta, acuerden cada que tiempo se volverán a reunir para revisarla, junto con su “Plan de Viaje” y en caso necesario pueden irle haciendo modificaciones, para incluir otros aspectos importantes que no habían contemplado.
Gracias por tus sugerencias y comentarios en: oasis_govara.mx