Aplausos sobre aplausos

 

 

José Antonio López Sosa

En la Secretaría de Turismo federal todo es aplauso sobre aplauso, quiero decir, evento al que asiste su titular debe tener la garantía que será ampliamente aplaudido, independientemente si las cosas van bien o mal en el sector.

Así sucedió con la celebración del día del Agente de Viajes hace unas semanas, en Tijuana las cabezas de sector se reunieron con el secretario de turismo federal y no hubo más que aplausos sobre aplausos. El señor Torruco (secretario de turismo federal) aplaudió sin cesar al señor Paniagua (presidente nacional de la AMAV), en reciprocidad, el señor Paniagua aplaudió hasta el cansancio al señor Torruco, como si fuese un concurso para ver quién aplaudía más y de forma más elegante. Así se aplaudieron a pesar de la problemática que existe por un lado, en el sector turístico nacional y por el otro, en el gremio de las Agencias de Viajes, como si con aplausos salieran adelante las empresas que han quebrado en el sector, tanto turístico como de agencias de viajes, ante la mirada impávida e inoperante de ambos personajes a lo largo de la pandemia, pero es lo que hay, eventos rimbombantes llenos de aplausos y carentes de soluciones y apoyos para el sector.

Solo me quedó una duda razonable, ¿quién aplaudirá más fuerte?, ¿el señor Torruco al señor Paniagua o el señor Paniagua al señor Torruco?, eso si me es muy complejo determinarlo.

Por otro lado, en el marco de ese festejado día de las agencias de viajes, recibo infinidad de correos donde agencias minoristas, esas que le venden viajes al público en general, se quejan –con nombre y apellido– de operadoras mayoristas (las que venden a los agentes minoristas, es decir, sus proveedores) que también venden al público en general, conocido en el argot del turismo como consumidor final. Definitivamente mala práctica, es como si es distribuidor de algo, le vendiera al comercializador y al mismo tiempo, al cliente del comercializador. Para mala fortuna no hay reglamentación clara y, quien es más gandalla –por decirlo suavecito– es el que gana por partida doble.

¿Qué les queda a esos agentes que se quejan?, exhibir esas malas prácticas, cuenten con este espacio para investigarlo, en esas estamos y hay casos muy claros que hemos detectado en el sector, haciendo de un negocio que pudiera ser próspero para todos, un círculo muy a la mexicana, donde tristemente ganan unos pocos y por partida doble.