Experta reconoce labor de mexicanas para lograr la paz positiva

·       La Dra. Carmen Magallón Portolés, presidenta de la Fundación Seminario de Investigación para la Paz (SIP), imparte la conferencia ‘Una genealogía de feministas por la paz en América Latina y España’

·       La IBERO, a través del Programa de Género e Inclusión, lleva a cabo el ‘4º Congreso de Internacional de Construcción de Paz con Perspectiva de Género’

Valentina González/ICM

 

La Dra. Carmen Magallón Portolés, presidenta de la Fundación Seminario de Investigación para la Paz (SIP), reconoció a las mexicanas Elena Torres, Elena Landazuri, Elena Arizmendi, Margarita Robles de Mendoza y Amalia Castillo León por incidir de manera importante en las organizaciones internacionales y lograr la paz positiva en nuestro país.

 

 

Durante su participación en el 4º Congreso de Internacional de Construcción de Paz con Perspectiva de Género, que realiza el Programa de Género e Inclusión de la IBERO, Magallón Portolés recordó que el debate feminista se produjo en México en 1916, en el congreso que se realizó en Mérida, Yucatán, donde los temas más destacados fueron la secularización de la educación de las mujeres y la ciudadanía política, pero también sobre asuntos controvertidos de la época como el control de la natalidad y el divorcio.

 

“Las mexicanas, al igual que las españolas, colocaron a la educación en el centro de sus reivindicaciones, pero esto no significa que el sufragio estuviera ausente del debate”, explicó la también presidenta de honor de la Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad.

 

La especialista destacó el trabajo que realizó Elena Torres, quien fue una educadora y feminista integrante del Partido Comunista Mexicano, quien será recordada por el compromiso que mantuvo toda su vida con la mejora de la educación y de las trabajadoras.

 

Torres estudió en la Universidad de Columbia, en Nueva York, en 1924, y fue asesora de la UNESCO. En 1919 fundó el Consejo Feminista Mexicano, la organización que eligieron las feministas de la Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad (LIMPAL/WILPF) estadounidense para conectar con México.

 

“Las mexicanas incidieron de manera importante en las organizaciones internacionales”, expresó la Dra. Carmen Magallón Portolés, durante la conferencia Una genealogía de feministas por la paz en América Latina y España.

 

Asimismo, añadió, que el vínculo más importante de México con WILPF vino con Elena Landazuri, una antropóloga iniciadora de la sección mexicana, quien había sido secretaria de Manuel Gamio, con quien trabajó en los inicios de la exploración del Valle de Teotihuacán. Tras estudiar en México arte y filosofía, viajó a Chicago y vivió en la casa (Hull House) que acogía a trabajadores pobres, la cual montó Jane Addams, la presidenta de WILPF internacional.

 

“Aquí es donde ella toma conciencia de la difícil situación que viven las personas migrantes, quienes no conocían el idioma ni tenían la situación privilegiada que ella tenía”, abundó.

 

Compartió que Elena Arizmendi ‘combatió’ la guerra a través de otra inspiración feminista, pues estudio enfermería y lideró la Cruz Blanca, una organización que atendía a los heridos sin importar la preferencia de los bandos.

 

Margarita Robles de Mendoza participó en la Comisión Interamericana de Mujeres, de 1930 a 1940, primera organización internacional fundada para mejorar el estatus de las mujeres en el continente americano. Creó la organización Unión de Mujeres Americanas (UMA) que tenía por lema ‘Asociación de mujeres evidenciando acción inmediata contra el armamentismo’.

 

Por su parte, Amalia Castillo León asistió a la Conferencia de Chapultepec en la Ciudad de México, en 1945, y junto con Minerva Bernardino logra que la Comisión Interamericana de Mujeres se incorpore a la Organización de Estados Americanos (OEA).

 

“Estas mujeres, junto con la brasileña Berta Lutz, fueron importantes en la creación, en 1946, de la Comisión sobre el Estatus de las Mujeres (CSW) que aún se mantiene y es importante en la ONU para empujar hacia la igualdad en las legislaciones de los países lo referente a la educación, el trabajo, la política, los derechos civiles y laborales y el ámbito familiar. (Hicieron) un trabajo por la paz positiva”, dijo Magallón Portolés.

 

Agregó: “Tenemos que agradecer la creación de este organismo, agradecer que abrieran esta vía en estas instituciones, para trabajar por el logro de esas legislaciones”.

 

Las doctoras Carmen Magallón Portolés y Sandra Blasco Lisa, ésta última integrante de la Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad (LIMPAL/WILPF) de España, se embarcaron en un proyecto de investigación para recuperar el pasado político y cultural de dos líneas de pensamiento: pacifismo y feminismo, elementos que no habían sido ampliamente investigados.