Los impuestos prediales del AIFA

Por: Atilio Alberto Peralta Merino

 

El titular de la Notaria 102 del Estado de México, ubicada en la Calle Rio Lerma, Colonia Ávila Camacho, en Naucalpan de Juárez, recibió la encomienda  del órgano de administración de la empresa de participación estatal mayoritaria adscrita a la Secretaría de la Defensa Nacional y responsable del proyecto en cuestión,   para  tirar las escrituras de adquisición de los predios sobre los que, a fin de cuentas,  terminaría por erigirse el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles.

El controvertido profesionista, apoderado de la diócesis de a Ciudad de México bajo el gobierno episcopal de Norberto Rivera Carrera, hoy por hoy, indiciado por lavado de dinero por parte del Buró Federal de Investigaciones de los Estados Unidos, recibió del ejército mexicano fuertes cantidades de dinero destinadas al pago de los impuestos traslativos de dominio que, conforme a lo dispuesto por el artículo 115 de a Constitución, corren a cargo y beneficio exclusivo de los ayuntamientos.

De conformidad a lo dispuesto por la Ley General de Bienes Nacionales, en concordancia con el artículo 132 de la propia Constitución, los bienes inmuebles destinados a un servicio público se rigen por la legislación federal  y están en consecuencia exentos del pago a las tesorerías municipales del impuesto traslativo del dominio de inmuebles ; no obstante lo anterior, el ejército mexicano asignó a Horacio Aguilar  fuertes sumas de dinero para cubrir dicho gravamen, un hombre, cuyo temple en el amor, recuerda en mucho a otros abogados como el también notario  Rodrigo Abascal , o el reciente extinto abogado mexiquense Jesús Hernández Alcocer.

El trazo y construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles corrió a cargo de una empresa de participación estatal mayoritaria, la misma que a la fecha se encuentra adscrita a la Secretaría de le Defensa Nacional como dependencia del ejecutivo federal coordinadora de sector.

Edificado sobre diversos predios ubicados en los municipio mexiquenses de Tecámac, así como de Nextlalpan en la que se erigió sobre las parcelas numeradas como 15, 43,194, 183,6,159,90,9,184,167 y 463 en la pantalla de la tesorería municipal  de dicha circunscripción;  y  de Zumpango en cuyo perímetro se habrían ocupado  otras 25 parcelas ejidales previamente regularizadas y adquiridas en los términos de la legislación agraria en vigor, sin que la autoridad hubiese recurrido al expediente de la expropiación de predios ejidales que tan mal recuerdo dejara de la comunidad de San Salvador, Atenco años atrás;   el  trazo y construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, estuvo a cargo de una empresa de participación estatal mayoritaria, la misma que a la fecha  se encuentra  adscrita a la Secretaría de le Defensa Nacional como  dependencia del ejecutivo federal coordinadora del sector correspondiente a las actividades declaradas como de seguridad nacional.

El notario en cuestión presentó diversas promociones señalando la improcedencia del cobro del impuesto municipal referido, tal y como, fundándose en los artículos 8° de la Constitución y 135 del Código de Procedimientos Administrativos del Estado de México  lo hiciera ante la tesorería del ayuntamiento de  Nextlapan,  el 18 de diciembre de 2019; aún habiendo recibido debida respuesta denegando su solicitud por parte del tesorero municipal Miguel Olvera Arrieta el 8 de enero siguiente, trató de sorprender a la misma autoridad promoviendo un nuevo escrito de fecha 31 de enero del 2020 aduciendo una supuesta y del todo improcedente “afirmativa ficta” .

El ejército mexicano, ya fuese por conducto directo de la Secretaría de la Defensa Nacional como dependencia coordinadora de sector, o por medio de la empresa de participación estatal mayoritaria encargada de la administración y operación del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, asignó recursos para un concepto cuyo cobro resulta improcedente.

Un  Pago que jamás se realizó, dado que, el profesionista en cuestión,  tras intentar diversas estratagemas administrativas  como la intentada en Nextlapan se decidió por impugnar dichos cobros, ante el Tribunal Federal de Justicia Administrativa,  dando seguimiento al proceso respectivo, incluso  en momentos en la que carecía de legitimidad procesal para actuar en virtud de que, por zarandear en público a su joven esposa, la secretario de gobierno del estado de México suspendió su licencia de notario a partir del mes de julio de 2020.

Por lo demás, la propia Secretaría de la Defensa, tras asignar un monto por un cobro improcedente, denunció que dicha asignación fue desviada por el profesionista en cuestión a su patrimonio particular iniciándose ante la Fiscalía General de la Republica la carpeta de investigación conducente.

En los días que corren,  el notario emparentado con el otrora presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación Luis María Aguilar  pretendió llegar a un acuerdo con la Secretaría de la Defensa para ser  perdonado por el desfalco de un impuesto que jamás ingresaría a las correspondientes tesorerías municipales.

Al parecer  un profesional, cuya patente notarial ha sido recientemente restituida por decisión judicial, bajo la peculiar consideración de que a su joven esposa no la “zarandeó” en funciones de notario, terminó por adueñarse de una importante suma de dinero derivada de obligaciones, por demás discutibles, dicho sea de paso que corresponden a la obra emblemática de la actual administración, y lo anterior,  si la habría realizado en el referido  carácter de notario.

En octubre del 2018, Norberto Rivera Carrera, peculiar  poderdante de Horacio Aguilar, fue victima de un atentado en su domicilio, la reseña de prensa de la época, señaló que el perpetrante de la acción en cuestión iba vestido como militar, y, los malpensados de siempre sugirieron en su momento que si vestía como militar  podía muy bien deberse a que  eventualmente lo era.

En los días que corren, tras desembolsar doblemente por la carga de impuestos municipales que no fueron impugnados debidamente, acaso por la falta de legitimidad procesal del eventual impugnante dada la sanción esgrimida en su contra,  el ejército mexicano se niega a llegar a acuerdos con un tipo de galantes modales con las damas jóvenes.

Después del viejo proyecto calderonista de estatuir la capellanía del ejército, y  tras el ataque cibernético al ejército ¿ podemos esperar alguna peculiar sorpresa por parte del  FBI?

 

albertoperalta1963@gmail.com